En el marco del Congreso Nacional del PRI, Pedro Santos, líder de la Ciudad de México, fue distinguido con la Medalla Emiliano Zapata por su compromiso con el campo mexicano y la justicia social.
En un acto que reconoció la trayectoria y el esfuerzo de quienes han dedicado su vida al campo mexicano, el Congreso Nacional del PRI entregó las Medallas Nacionales, uno de los honores más significativos dentro del partido. Entre los distinguidos, sobresalió Pedro Santos, líder del PRI en la Ciudad de México, quien recibió la Medalla “Emiliano Zapata”, un símbolo de resistencia, trabajo colectivo y compromiso con la justicia social. Este reconocimiento refleja tanto su labor personal como el esfuerzo de las comunidades campesinas que sigue apoyando.
El evento contó con la presencia de destacados dirigentes y militantes, quienes celebraron los logros de Santos y destacaron la importancia de reconocer a quienes fortalecen al país desde sus raíces. La Medalla Emiliano Zapata es más que un reconocimiento; es un llamado a continuar defendiendo al campo mexicano, promoviendo desarrollo, equidad y dignidad para los hombres y mujeres que trabajan la tierra día a día.
Pedro Santos agradeció la distinción con humildad, resaltando que el premio no solo es suyo, sino de todas las y los campesinos que continúan construyendo un México más digno y próspero. Su mensaje enfatizó que la política debe servir para empoderar a quienes sostienen al país con su trabajo, y que las acciones de todos los priistas deben enfocarse en mejorar la vida de estas comunidades.
Alejandro Moreno Cárdenas, presidente nacional del PRI, se sumó a las felicitaciones y subrayó que el reconocimiento a Santos ejemplifica la visión del partido: un PRI cercano a la gente, que escucha sus necesidades y trabaja por el desarrollo social y rural. “Celebramos que líderes como Pedro Santos reflejen el compromiso del priismo con la justicia social, el campo y las comunidades”, afirmó.
Con este homenaje, el PRI CDMX refuerza su compromiso con las causas rurales y la defensa de quienes trabajan la tierra, destacando la importancia de los líderes locales que transforman su entorno. La Medalla Emiliano Zapata se convierte así en un símbolo de esperanza y orgullo, recordando que la política efectiva se construye con acciones concretas, cercanas a la gente y con un profundo respeto por sus derechos y necesidades.
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