El PRI Baja California Sur refuerza su estructura y compromiso con la ciudadanía, mientras Alejandro “Alito” Moreno respalda la renovación de las bases para consolidar un proyecto político sólido y cercano a la gente.
La militancia del PRI en Baja California Sur sigue creciendo y consolidándose gracias a una jornada permanente de afiliación que demuestra el compromiso del partido con la ciudadanía. Desde los comités municipales hasta las estructuras seccionales, priistas de todas las regiones del estado participan con entusiasmo en este proceso que busca sumar nuevas voces y construir un proyecto político sólido de cara a los retos que enfrenta la entidad.
El presidente del Comité Directivo Estatal destacó que esta afiliación constante es la mejor prueba de que el PRI sigue siendo una fuerza viva, cercana a la gente y con capacidad de organización. La participación de jóvenes, mujeres y líderes comunitarios refleja que cada día son más los sudcalifornianos que confían en la experiencia y visión de futuro que representa el partido.
En este esfuerzo también se contó con el respaldo de la dirigencia nacional, encabezada por Alejandro “Alito” Moreno, quien ha reiterado que la renovación de las bases es clave para recuperar los espacios que Baja California Sur necesita. Alito ha señalado que solo con unidad, trabajo de territorio y compromiso social se logrará que el PRI vuelva a ser la opción que ofrezca resultados a las familias sudcalifornianas.
Las jornadas de afiliación no solo significan sumar nombres al padrón, sino fortalecer la identidad priista con capacitación, diálogo y propuestas que atiendan las demandas más urgentes de la población. La inclusión de nuevos militantes permite al PRI contar con más manos y corazones dispuestos a trabajar por el bienestar de cada municipio.
Con esta dinámica de trabajo constante, el PRI Baja California Sur demuestra que su estructura permanece activa, escuchando a la gente y construyendo las bases de un proyecto que mira al futuro con determinación. La afiliación es hoy una muestra de fuerza, pero también de esperanza, para que el tricolor recupere el lugar que merece en la vida política del estado.
